El ejemplo de Coldplay con energía cinética para un futuro sostenible
¿Alguna vez te has preguntado por qué una pelota que rueda pierde velocidad? La respuesta está en la energía cinética, la energía del movimiento.
Todo lo que se mueve, desde una hormiga hasta un planeta, posee esta energía. Cuanto más rápido se mueve un objeto y mayor sea su masa, mayor será su energía. Un camión en movimiento, por ejemplo, tiene más energía cinética que una bicicleta, ya que su masa es mayor y, por lo general, se desplaza a una velocidad superior.
La evolución de la ciencia ha impulsado avances tecnológicos que han transformado nuestra sociedad. La comprensión de los principios científicos ha sido fundamental para desarrollar soluciones innovadoras que buscan mitigar nuestro impacto ambiental. Un ejemplo claro de esta sinergia entre ciencia y tecnología lo encontramos en el campo de las energías renovables, como la eólica y la hidráulica, que aprovechan la energía cinética para generar electricidad.

Transformando el movimiento en energía útil
La energía cinética representa una fuente de energía sostenible. Al aprovechar el movimiento de las personas, se reduce la dependencia de combustibles fósiles y se disminuye la huella de carbono de los eventos. Además, es aplicable en diversos contextos, desde conciertos y festivales hasta espacios públicos y gimnasios.
Tal es el caso de la banda británica Coldplay, reconocida por sus conciertos espectaculares y su compromiso con el medio ambiente, quien ha dado un paso más allá al incorporar la energía cinética en sus espectáculos. ¿Cómo? A través de bicicletas estacionarias y una pista de baile cinética que transforma el movimiento del público en energía renovable.


¿Cómo funciona?
El sistema de las bicicletas estacionarias es bastante sencillo en su concepto, aunque complejo en su implementación. Las bicicletas están conectadas a generadores eléctricos. Al pedalear, las personas transforman la energía mecánica de su movimiento en energía eléctrica a través de un proceso de inducción electromagnética.
Por su parte, la pista de baile cinética es una superficie especial que contiene materiales piezoeléctricos que, al igual que con las bicicletas, captura la energía del movimiento de los asistentes al concierto. Cada salto o paso genera electricidad que puede ser almacenada en baterías y utilizada posteriormente para alimentar diferentes elementos del espectáculo, como luces, pantallas o el sistema de sonido.
«Cuando se mueven, impulsan el concierto» – Chris Martin
«Cuanto más se mueve la gente, más ayudan. ¿Sabes cuando el líder de un grupo dice durante un concierto: ‘Necesitamos que saltes? Cuando digo eso, literalmente necesito que saltes, porque si no lo haces, se apagan las luces». «Cuando se mueven, impulsan el concierto” Señala Chris Martin vocalista del grupo, durante declaraciones ofrecidas a la BBC.
Esta iniciativa no solo contribuye a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, sino que también sensibiliza al público sobre la importancia de la sostenibilidad y la energía renovable.
En un mundo que busca soluciones sostenibles, la energía cinética emerge como una promesa de un futuro más limpio y eficiente. Desde los grandes escenarios hasta las pequeñas acciones cotidianas, el aprovechamiento de esta energía nos invita a repensar nuestra relación con el entorno.